El divorcio y las consecuencias en los niños

El avance de la sociedad ha traído consigo nuevas estructuras familiares. El concepto tradicional lo que vendría a ser la “familia conyugal” más común ya no es la única estructura posible de unidad familiar. En las nuevas culturas contemporáneas una de las circunstancias que  aumenta con los años  son los divorcios o extinción de la convivencia de la pareja. Y con ello nace un nuevo concepto de estructura familiar conocido como monoparental.

Estudiamos cómo afecta esta situación a los hijos de las familias, en especial en su rendimiento académico y ámbito tanto escolar como extraescolar. Para ello, realizamos un estudio cualitativo a partir de entrevistas con profesionales del sector de la educación. Entre los profesionales encontramos tanto estudiantes en prácticas de educación, como profesores tradicionales, profesores de colegios de “Educación libre o viva”, monitores y entrenadores de actividades extraescolares. Os explicamos un poco qué nos cuentan y qué podemos concluir.

"Un 20% de los padres de alumnos están divorciados"

Cada vez son más los matrimonios que tras no funcionar lo bien que se esperaba, deciden divorciarse. Hablamos de que España tiene un 61% de rupturas de pareja, posicionándose quinta a nivel mundial. Tal y como nos dicen los entrevistados, y las cifras oficiales, cada año el porcentaje aumenta un poco más y la gran mayoría se trata de casos familiares con hijos. Todos los entrevistados afirman este hecho, Federic Bonsoms Canet, profesor de la Escuela Pia de Sarrià ,Barcelona, afirma lo siguiente: “Por norma general, un 20% de los padres de los alumnos de clase están divorciados y cada vez se dan más separaciones en familias con niños más pequeños”.

"Cada vez más el divorcio se da en familias con niños más pequeños"

Lo cierto es que este hecho ha aumentado en los últimos años. Pedro Payeras, profesor del colegio Providencia del corazón de Jesús, Barcelona, afirma que “Cada vez son padres de niños más jóvenes”. La edad temprana de un niño en estas circunstancias es un factor muy importante, ya que cuanto más pequeños son más información retienen. Los niños durante el crecimiento son “esponjas” y sus padres son sus máximos referentes, lo que supone que su forma de resolver los conflictos se convertirá en el modelo que aplicarán ellos instintivamente cuando se encuentren en situaciones similares.

"Un divorcio puede afectar a nivel cognitivo, social y personal...por supuesto también al rendimiento escolar"

Celia Vizuete, estudiante de Educación Primaria, nos da su punto de vista: “Un divorcio consensuado, estable y con una buena relación entre los progenitores no debería tener que afectar al rendimiento del hijo. En los divorcios traumáticos o difíciles donde los niños se ven involucrados, la situación afecta al estado de ánimo y a la actitud el niño, lo que indirectamente afecta también a su rendimiento académico”.  Federic Bonsoms afirma que un divorcio puede afectar a nivel cognitivo, social, personal y a todos los aspectos emocionales de cualquier tipo, y que por ello es normal que en gran medida afecte al rendimiento escolar del alumno.  

David Armada, padre colaborador de una Escuela libre afirma lo siguiente: “El concepto rendimiento académico está asociado a una educación basada en valores competitivos y a una visión muy productivista de la vida. En la educación viva, realizamos una observación muy atenta y sin juicio sobre el estado emocional del niño y para que este tenga un interés natural por conocer y aprender cuanto le rodea es necesario que esté bien emocionalmente. Por lo tanto, un divorcio o una separación puede afectar mucho a un niño. El niño no puede convertirse en receptor de comentarios negativos de las partes del conflicto”.

La familia y el centro escolar deben trabajar unidos en bien de la estabilidad emocional del niño

La familia es el centro de la vida de un niño. Pero en situaciones así, la escuela puede mediar entre la familia y el niño con el objetivo de ayudar en situaciones que estén resultando complicadas. Pilar Codina, profesora de la escuela Joaquim Abril, Sant Fost, afirma que se realizan derivaciones a especialistas y psicólogos para ayudar en casos necesarios. Rebeca Falcconi es profesora de Danza en el Patronato Recreativo de Cornellà, y afirma que desde la escuela hacen lo posible por adaptarse a las situaciones de familias con situaciones especiales, repartiendo el doble de material o circulares e incluso haciendo el doble de reuniones.

Todos los docentes que han participado en las entrevistas coinciden en que la naturalidad y el máximo respeto a los hijos son los dos pilares a la hora de llevar a cabo un divorcio. El egoísmo es muchas veces lo que ciega a las parejas. Es importante hacerles entender a los niños que aunque la situación familiar cambia, no implica un cambio en la relación personal y directa con el niño. Paula Talavera, estudiante de Educación Infantil y monitora de tiempo libre afirma algo importantísimo: “Es necesaria una completa comunicación entre los progenitores y el profesor, con el fin de que pueda asegurarse de que ambos tienen la misma implicación en la educación del hijo”.