Escola Animal es un proyecto educativo surgido en Sabadell que se basa en la empatía hacía los animales para fomentar así una sociedad dotada de valores como la cooperación, la protección y el mutualismo. Actualmente tienen disponibles cuatro productos educativos (Làmina animal, Fauna i plora, Belles bèsties y Convivència responsable) con los que se desplazan a diferentes centros que lo soliciten para impartirlos.

“Un niño o una niña que respete a los animales será capaz de respetar a los otros seres humanos”

No solo eso, Escola Animal también ha creado la plataforma Convivència responsable  donde facilitan un manual gratuito para todas aquellas familias que deciden adoptar un nuevo miembro (perros, gatos o hurones) y quieren informarse acerca de su correcto cuidado y bienestar.

Desde Inèdit Magazine tenemos el placer de poder entrevistar a Natàlia, coordinadora general y responsable educativa del proyecto Escola Animal:

• ¿Cómo surgió la idea de crear Escola Animal y cómo describiríais vuestra labor?

Desde la Associació Animalista Libera tuvimos la oportunidad de presentarnos en los presupuestos participativos de la ciudad de Sabadell (Barcelona) y, tras unos meses de difusión y trabajo en la calle, ganamos con este proyecto.

La justificación de este proyecto se basa en estudios científicos que demuestran que una educación basada en la empatía hacia los animales repercute en mejores comportamientos prosociales y ayuda a difundir una cultura de la paz entre niños y niñas.  Gracias a la experiencia de PRODA (Profesionales para la Defensa Animal) y la integración de la Fundación Franz Weber y CoPPA (Coordinadora de Professionals per a la Prevenció d'Abusos) hemos podido desarrollar productos de diferentes características y naturalezas convirtiéndose, así, en un proyecto muy completo e innovador.

Escola Animal no es solo una iniciativa sobre protección animal sino que es un proyecto que habla de la sociedad. Cuando expresamos la importancia de ser solidarios con los animales que podemos encontrar desatendidos o abandonados, como por ejemplo los orangutanes que están perdiendo sus selvas por la extensión de cultivos de aceite de palma, también estamos hablando de la importancia de conocer las historias de personas que están viviendo en situaciones difíciles. Cuando hablamos de la discriminación que ejercemos sobre animales que nos rodean, como las palomas o las ratas, también estamos hablando de la discriminación a las personas de otra etnia, cultura, religión o fisonomía.

La empatía, como capacidad de ponerse en el lugar del otro, se entrevé en edades primarias pero hasta los inicios de la adolescencia no se puede hablar de su consolidación. Promover programas educativos de Educación Humanitaria en las escuelas o en instituciones educativas, por lo tanto, ocasionará un entrenamiento de conductas y habilidades prosociales que son urgentemente necesarias para cambiar los hábitos que actualmente hay instaurados.

• He visto que el embajador de vuestra escuela es un perro llamado Ortiño, ¿cuál es su historia?

Ortiño es un perro que ha pasado por todo lo que no debería pasar un perro.

Desde cachorro, y al ser un perro de raza, tuvo que sufrir la separación de su madre y de sus hermanos y hermanas pues, cuando compramos un animal, estamos contribuyendo a un tráfico cruel e injusto hacia estos. Una familia de Lugo lo compró y estuvo ocho años encadenado en el patio, sin recibir caricias ni estímulos. Estaba fuera con sol, con lluvia y con frío, y a la familia no le importaba demasiado. Un día esa familia se fue de aquella casa y, sin ningún remordimiento, lo dejaron allí. Un vecino le iba dando comida y agua hasta que un día decidió romper su cadena y llevarlo a la protectora. Allí pasó dos años encerrado en la jaula, le paseaban como podían (por falta de voluntariado) y su estado anímico cada vez era peor.

A Ortiño le quedaban pocos días de vida porque como era un perro anciano, tenía epilepsia y un tumor en la cola, nadie lo quería. Un perro con estas características sólo tiene un único final: el sacrificio. Y es que muchas perreras de España optan por esta «solución» por el exceso de animales abandonados y los pocos recursos materiales y personales. Horas antes de que Ortiño fuera sacrificado, nos enteramos de su situación, lo sacamos de allí y nos lo llevamos a Barcelona.

Ahora es un perro muy feliz, contento de tener una familia y nos ayuda con este proyecto para que todos conozcan la realidad de los perros comprados y nos lo pensemos mucho antes de adquirir uno. ¡Porque es mejor ADOPTAR que COMPRAR!

• ¿Cuál ha sido la reacción de los centros educativos al proponerles vuestras actividades? 

La acogida de las escuelas ha sido muy positiva desde el primer momento. Las directoras de los diferentes centros en los que hemos impartido Làmina animal, el programa de comprobación científica, estaban ilusionadas por incorporar estos contenidos innovadores y pioneros en sus escuelas. El personal docente siempre se ha mostrado activo y participativo durante las sesiones y han conseguido que nuestros contenidos se trabajen de manera transversal en diferentes materias.

• Sobre el programa Làmina animal, que ya habéis realizado en diferentes centros educativos, ¿qué  impacto ha tenido en el alumnado?

Este programa educativo es extenso, se lleva a cabo en 12 sesiones, y queremos demostrar que aplicando un contenido relacionado con los animales y el medio ambiente se producen cambios conductuales en el alumnado. Para poder llevar a cabo esta investigación hemos contado con la ayuda de CoPPA (Coordinadora de Professionals per a la Prevenció d’Abusos), que realizó diferentes tests psicométricos antes y después del programa educativo.

Los resultados muestran una mejora en la actitud positiva hacia los animales ya que, mediante el conocimiento de sus características y necesidades, se fomentan buenas conductas y prácticas hacia ellos. 

En cuanto al desarrollo de la empatía no se ha encontrado un aumento significativo, de manera global, pero sí de forma más individual. Un factor que podría haber influido en este resultado ha podido ser la edad de los y las participantes, el número de sesiones y la cantidad de participantes. Cabe mencionar que los resultados nos muestran puntuaciones más altas de empatía en niñas que en niños, corroborando así los resultados en estudios previos realizados por otros autores.

Otro fenómeno destacable es el hecho de que el alumnado siente una atracción intrínseca hacia los animales y se ha demostrado en los resultados analizados. Esta atracción propicia una motivación para incorporar nuevos aprendizajes, contenidos y, consecuentemente, actitudes.

Al poder evaluar los resultados, tanto de manera objetiva (tests psicométricos) como subjetiva (observación),  nos da la posibilidad de conocer qué puntos débiles tiene el programa y, por consiguiente, modificar e incorporar contenidos más afines a las características del alumnado y a las necesidades sociales actuales como, por ejemplo, la emergencia climática. 

• ¿Cuál de los cuatro productos educativos que ofertáis ha sido por ahora el más solicitado? ¿Y cuál ha obtenido mejor recepción por parte de los alumnos?

El programa más solicitado ha sido Convivència responsable, ya que es el de duración más corta y el de contenido más explícito. Las escuelas que solicitan esta charla ya están trabajando algún proyecto sobre animales de compañía y necesitan ampliar y/o complementar la información que, de forma curricular, ya tienen a su alcance.

En cuanto al alumnado, no es que tengan preferencia por un programa en concreto sino, más bien, por una temática concreta. Los plásticos en los mares, la extinción de especies salvajes o conocer a Ortiño y su historia, son los contenidos que más gustan y los que más participación despiertan.

• ¿Cómo relacionáis el trato que les damos a los animales desde pequeños con otros tipos de abusos como el bullying, el machismo o el racismo?

Hace unos meses CoPPA, entidad colaboradora con Escola Animal, sacó a la luz un estudio realizado en Ecuador donde se afirma lo siguiente: «Casi el 95 % de las mujeres que denunciaron maltrato animal por parte de sus parejas habían sufrido personalmente alguna forma de violencia por parte de las mismas y, en la mayoría de los casos (75 %), cuando los actos de crueldad animal producidos fueron graves, la violencia en el marco de la pareja también lo fue».

Otros estudios nos hablan de que la crueldad de los niños y las niñas hacia los animales está relacionada con la violencia interpersonal en la edad adulta.

Otros estudios también han sugerido que los niños y niñas que son crueles con los animales pueden haber presenciado o experimentado violencia familiar y corren el riesgo de ser sujetos agresivos durante la adolescencia y la edad adulta.

Existe una relación directa entre la violencia hacia los animales y la violencia hacia las personas. Y es que un niño o una niña que normaliza una violencia hacia un animal indefenso, vulnerable y débil lo hará, a edades más avanzadas, hacia colectivos que, según su percepción y/o educación, considere inferiores: mujeres, personas de otras etnias, culturas, religiones, etc. Por eso creemos que desde la educación en la empatía hacia los animales podemos mejorar conductas, comportamientos y habilidades prosociales hacia los animales y, consecuentemente, hacia las personas y hacia la sociedad. Las personas que son conscientes del maltrato animal son más empáticas y sensibles ante situaciones de violencia e injusticia hacia otras personas.

• ¿Creéis que debería haber una materia obligatoria en el currículo educativo que tratara los problemas actuales de la sociedad empezando por la educación en la igualdad con los animales?

La empatía debe ser, indudablemente, una herramienta indispensable para trabajar en los centros educativos; por eso, desde diferentes organizaciones, llevamos algún tiempo intentando que la educación en la empatía hacia los animales se convierta en materia obligatoria en el currículo educativo.

Durante la anterior legislatura, en sede parlamentaria, se presentó una proposición no de ley pero hubo dos partidos que votaron en contra. Ahora, con el nuevo gobierno, tenemos esperanzas de que pueda convertirse en una realidad. Además podría caber la posibilidad de que lo incluyan en la próxima ley educativa.

• ¿Hay algo que se esté quedando en el tintero y que os gustaría contarnos o destacar de Escola Animal?

Durante el curso escolar 2018-2019 tuvimos el honor de contar con la colaboración de actores y actrices como Fernando Tejero, Nathalie Poza y Sara Rivero. Se implicaron y participaron en el programa Convivència responsable dando charlas en las escuelas de Sabadell, además de difundir e informar sobre nuestro proyecto en sus redes sociales. Esto ha supuesto no solo una enorme promoción de nuestra tarea, sino que los centros educativos contacten más con nosotras para impartir este tipo de charlas.

También me gustaría contaros que, durante las sesiones de Làmina animal, el alumnado propuso hacer dos recogidas de alimento para dos protectoras de Cataluña. Ellos y ellas organizaron toda la actividad, enviaron la información a las familias y, además, invitaron a toda la escuela para que el resultado fuera todo un éxito.

• Después de ver lo interesante que es vuestro proyecto, seguro que muchos de los centros educativos que nos estén leyendo querrán llevarlo a cabo en sus aulas… ¿Qué tienen que hacer para contactar con vosotros? ¿Cuál es el proceso?

Quien quiera saber más sobre Escola Animal puede contactar conmigo a través del email n.oriol@liberaong.org y le proporcionaré toda la información que desee.

 “Si te gusta el canto de los pájaros no los enjaules, planta árboles”