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Padres, profesores y alumnos opinan sobre la educación sexual

Del escándalo a la normalidad. La sexualidad llega por la literatura

“Si no hay restricciones con la cantidad de videojuegos de matar, ¿por qué debería haberla con la lectura erótica cuando es algo tan natural?” Marina, 21 años

La semana pasada publicamos un artículo, titulado Polémica del sexo en la literatura juvenil, al que han respondido muchos padres con mensajes en nuestro Facebook. La idea era compartir las nuevas tendencias de lectura juvenil en las que hay títulos como After de Anna Todd que se alejan bastante de las lecturas recomendadas por los planes de estudio. Nuestra redactora Sara González  ha salido a la calle a entrevistar a padres, estudiantes y profesores para saber más sobre la verdadera opinión de los agentes importantes en la educación actual.

“Estamos en  una sociedad que carece de una mente abierta hacia algo tan normal como es la sexualidad.”

Las opiniones recogidas de padres y profesores, sobre el tema del sexo en los libros para adolescentes, tras una serie de preguntas, revelan unas conclusiones comunes: Se ha levantado una polémica entorno a este tema porque estamos en  una sociedad que carece de una mente abierta hacia algo tan normal como es la sexualidad.

“Existe una edad necesaria para comprender de qué hablamos cuando nos referimos al sexo”, Antonio, 45 años

Antonio, 45 años, padre de dos hijos que ya han pasado la adolescencia, nos plantea que desde la coherencia lógica que existe una edad necesaria para comprender de qué hablamos cuando nos referimos al sexo, se debería tratar desde una perspectiva natural; educar con normalidad, sin prejuicios ni tabús desde casa y desde las aulas a lo largo del crecimiento.

“Hay que enseñar más allá de la funcionalidad de la procreación”, Xavi, 46 años

Coincide con Xavi, 46 años, profesor de historia en la ESO y el Bachillerato,  afirma que hay conseguir crear una mentalidad formada entorno al sexo, no solo información, cuando se enseña más allá de la pura funcionalidad de la procreación, y se profundiza en el significado del erotismo, la sensualidad y el amor. De esta forma, evitamos riesgos futuros no solo derivados del acto sexual, si no también de relaciones tormentosas donde se encuentran la posesividad y las dependencias. Nos dice “Siendo profesor, en cuarto de la ESO ya escuchas historias de alumnos que te devuelven a la realidad y te hacen ver cómo han cambiado las generaciones desde lo que fue mi adolescencia”.

“Libros que no cumplen la función pedagógica estandarizada, pero un libro no tiene por qué cumplirla”, Nuria, 15 años

Nuria, 15 años, quién ha leído los libros de la saga de Anna Todd, nos dice “Me encantaría estar dentro de una historia así por la pasión con la que los personajes viven el romance. La resumiría como emocionante, y me quedo con el final cuando por fin consiguen estar juntos ¿Qué tienen de malo libros como After de Anna Todd? Puede que no cumplan la función pedagógica estandarizada, y por ello sean criticados. Pero un libro no tiene por qué cumplirla.

La sexualidad es un tema complejo, no complicado, y por ello, deben  intervenir no solo familia y escuela sino también otros elementos de la  sociedad, no se trata únicamente de evitar embarazos sino de cómo relacionarse con uno mismo y los demás sexualmente hablando. La existencia de este tipo de libros es más que normal, pero es criticada porque llena ese hueco de mentalidad todavía retrógrada de nuestra sociedad.

“Si no hay restricciones con la cantidad de videojuegos de matar, ¿por qué debería haberla con la lectura erótica cuando es algo tan natural?”, Marina, 21 años

Marina, con 21 años, afirma “Si no hay restricciones con la cantidad de videojuegos de matar, ¿por qué debería haberla con la lectura erótica cuando es algo tan natural?” “Si se tratara como tal, los jóvenes no deberían buscar lo escandaloso, porque tendrían una mentalidad bien formada”.

El género erótico par adolescentes debería focalizarse en el buen gusto y la calidad del mensaje, en ocasiones aparecen roles estereótipados y conductas agresivas que pueden confundir a jóvenes por su falta de experiencia.  No olvidemos que un libro erótico, aunque sea un “bestseller”,  no implica  calidad de contenido, pero esto no es algo exclusivo de la literatura erótica para adolescentes.

Cuanto mejor informados estén los lectores adolescentes, más disminuirá el peligro de comportamiento agresivos o insanos. ¡Qué mejor forma de hacerlo que  mediante la lectura! 

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